El afecto del profesorado hacia su alumnado es una variable de gran importancia. Muchos alumnos y alumnas que pueden considerarse "resistentes" al fracaso atribuyen esta circunstancia al apoyo personal del profesorado y a las expectativas que les proyectan, y los niños y jóvenes, comentan la influencia de sus profesores tutores y de los orientadores, y les agradecen su escucha, su confianza y su ánimo. Para un alumno o alumna con dificultades de aprendizaje, la figura del profesor o profesora no es sólo la de un enseñante, es la de un mediador o facilitador que modela una identidad personal positiva. Así, el profesorado que muestra a diario su interés y apoyo al alumnado, mediante el respeto y la consideración de altas expectativas a través de las actividades curriculares que organiza en el aula, está impulsando con su actitud la resistencia al fracaso.
Samuel Fernández Fernández.
Diversidad y diferenciación educativa. Dos caras de una misma moneda.
No hay comentarios:
Publicar un comentario